Puerto Morelos es un municipio pintoresco en la Riviera Maya que con el paso de los años sigue conservando su esencia de pescadores que lo convierte en un pueblo ideal para descansar del ajetreo de la ciudad. Como ya te contamos en Revista Caribe MX este paraíso del caribe mexicano nos ofrece infinidad de aventuras en su selva maya que combina con sus playas de arena blanca y por si fuera poco ofrece a sus visitantes monumentos que han creado la identidad del portomorelense.
En está ocasión te vamos a platicar de uno de los íconos de este municipio y nos referimos a su Faro Inclinado. Este faro se ha convertido en la imagen más representativa de Puerto Morelos, su imagen se encuentra en la mayoría de sus postales y para su gente representa la fortaleza y resistencia. El faro inclinado se encuentra a un lado del muelle de la localidad, razón por la cual ha sido testigo de desastres naturales que han azotado al municipio y la región, fenómenos que han dejado destrucción a su paso y el faro ha soportado cada uno de ellos.
El primer faro de la localidad fue construido en 1905, aunque solo se trataba de una luz en la parte superior de un poste de metal, sirvió de orientación para los navegantes en el comienzo del auge del comercio del chicle y del corcho. En el año de 1946 fue sustituido por un faro de concreto que utilizó estructuras antiguas mayas, con una altura de casi 10 metros fue construido en el mismo lugar del anterior, lo pintaron de blanco con un ribete azul.
Fue precisamente este faro que recibió la fuerza del huracán Beulah en septiembre de 1967, el huracán con vientos de hasta 250 km/h que logró inclinarlo, pues la fuerza del huracán degradó los cimientos del faro dejándolo inservible para la navegación. Años después con la construcción de la carretera que comunicaba a Puerto Morelos con la reciente zona turística de Cancún, las autoridades decidieron de una vez derribar el faro con la ayuda de un tractor, pero dicho esfuerzo fue en vano, pues la arena de la playa no permitió usar al tractor, entonces se decidió dejarlo en reposo para la eternidad.
Después de su inclinación se construyó un nuevo faro más alto y más alejado de la playa. En 1988 el huracán Gilberto y en el año 2005 con el huracán Wilma, mismos que azotaron una vez más al municipio con fuertes vientos el faro inclinado logró resistir los embates de la naturaleza.
La fuerza del faro se ha convertido en un símbolo de fortaleza para los habitantes de Puerto Morelos, que pese a las adversidades les recuerda que con su arduo trabajo hacen de este paraíso un lugar próspero y tranquilo.
En tu visita por este cálido municipio que cuenta con una de las mejores playas de toda la Riviera Maya pues con el Parque Nacional de Arrecifes que se encuentra frente a sus costas funciona de barrera natural lo que permite tener un oleaje tranquilo, una de tus fotos obligadas ya sea de día o de noche tiene que ser con su máximo ícono el Faro Inclinado.
Ricardo Rugerio