Te damos algunos consejos para evitar que tus camisas se arruguen cuando viajes.
La situación podría terminar si guardas las fundas que te dan en la tintorería. Esas bolsas de plástico delgado pueden salvarte.
Siempre todos queremos darnos unos días de descanso en alguna playa o en otra ciudad que no sea la nuestra, pero cuando llegamos al destino y desempacamos las camisas que queremos usar en una velada romántica o de fiesta.
Todas las prendas están arrugadas como si se hubieran exprimido.
A ninguno le gusta verse desaliñado mientras se está de viaje, pero ¿quién tiene tiempo de corregir esas arrugas, aún cuando el hotel preste una plancha?
El secreto para que una camisa o blusa no tenga ninguna arruga está en la forma de empacar.

¿Cómo lo podemos hacerlo?
Lo primero, que debemos hacer es doblar las camisas y blusas correctamente, ya que si las empacas hechas bola, eso tendrás cuando las saques.
Debes extender una funda de tintorería sobre una superficie plana e introduce una de las camisas dobladas hasta el extremo superior.
Apila una segunda camisa encima de la primera, pero fuera de la funda.
Continúa doblando la parte inferior de la funda de modo que quede sobre la segunda camisa.
Luego, introduce una tercera camisa del lado abierto y ponla encima de la segunda prenda.
Tienes que empacar esta pila de camisas ajustándola bien; si es posible, utiliza las tiras internas para que no puedan deslizarse.

Así que cada camisa está atrapada entre capas de plástico resbaladizo, la tela no se amontonará ni arrugará.
Este tipo de técnica funciona bien únicamente con una o dos camisas, simplemente envuélvelas con el plástico restante.
Si necesitas más de tres camisas en tu viaje, extiende otra funda plástica y repite desde el principio.
Con datos de Selecciones Reader’s Digest